¡Y que tiene que ver con Viscarra? Me encanta que me digan eso.
Desde la vez que conversé en un homenaje a Viscarra en un boliche rockero metalero, para muchos no tenía nada que ver en lo absoluto. Había un antropólogo. un par de profesores, un carpintero, un sociólogo y este servidor ociólogo de tiempo completo. El sociólogo tenía una mirada muy académica que al principio se enfrento con el antropólogo radicla que según él ni escuchaba música en inglés, mas tarde lo descubrí al ver su cuentita de Facebook, el carpintero servía los tragos que se sucedían uno tras otro. Al final el ocio de la faena nocturna pudo mas y encontramos un punto exacto de inspiración que el autor del hampa podía tener. Y así esta canción probablemente no la haya escuchado Viscarra, así como nunca leyó los libros que le sugerí en vida, cada vez que me lo topaba por las calles y callejas de la vida, en esos caminos que hacen al alcohol y el exceso de sufrimiento.
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